CASA M
Los promotores de la vivienda, demandan otras necesidades: Quieren una vivienda que aproveche la mejor orientación, quieren una casa que ofrezca una cierta complejidad espacial y mucha luz, quieren que los espacios libres resultantes de la implantación y sus retranqueos tengan un valor espacial y de uso, quieren aprovechar la ventilaciones cruzadas en todas las estancias.
La propuesta parte de un eje central de relación vertical de la vivienda que genera un patio interior de vestíbulo dentro de la propia vivienda, a partir de este eje, se divide la vivienda en dos crujías a ambos lados, crujías que se disponen formando retranqueos para aprovechar la luz de poniente agrupando el máximo de edificabilidad contra la medianería y «esponjando» la parcela, para permitir tanto el acceso al aparcamiento como una iluminación generosa en cada una de las estancias.
Se asocia cada una de las estancias con un volumen o «cubo» independiente, resultando en un retranqueo o vuelo de los mismos en función de las necesidades de soleamiento, sombra o protección de dichas estancias. La materialidad del proyecto cobra especial importancia, resolviéndose todo el proyecto con un único material, fabrica de ladrillo visto con un aparejo belga o “flamenco”, que permite que mediante el movimiento, desplazamiento o ausencia del ladrillo a “tizón”, la fábrica se convierta en un zócalo rugoso que le da asiento a la edificación o en celosía perforada que permite el paso de la luz y que recuerda a las construcciones vernáculas de secaderos de la vega de Granada.
Todo el pavimento exterior, rampas y escaleras, se resuelven con el mismo material, contribuyendo a una imagen monolítica del proyecto. El nuevo edificio surge como una pieza prismática en la que se produce ligeros “desfases” que generan espacios de sombra, de este modo lo que en planta primera es un pasillo de distribución y acceso a los talleres y que protege del asoleamiento directo en la fachada sur, en planta baja se convierte en una galería abierta que produce asimismo una protección de sombra a los paños acristalados de los talleres. La formalización exterior sugiere materiales y formas tradicionales y reconocibles en el entorno próximo. De este modo, el revestimiento de fachada -a través del ladrillo visto- acerca el edificio al entorno y permite una integración en el modelo de continuidad propuesto para el conjunto de edificaciones de la Facultad de Bellas Artes, manteniendo un lenguaje contemporáneo.
Se analiza a través de la gran riqueza en la tradición de los edificios fabriles así como en los secaderos de tabaco el uso de pieles caladas por medio de celosías cerámicas, reinterpretando estas soluciones para ofrecer una imagen abstracta del edificio así como de una protección solar que permite una iluminación natural de los talleres y aulas y que otorga un comportamiento climático de fachada ventilada por delante de los paños acristalados. La configuración del antiguo hospital, organizado mediante un edificio lineal que va formando patios abiertos en los que se alterna la vegetación, supone una oportunidad para la implantación de un uso universitario de tanta vocación de ocupación y utilización del espacio libre como es una facultad de bellas artes.
Fecha:
2022